Un clásico entre las fotografías de viaje son las vistas pintoresca, que reproducen las escenas más significativas de lo visitado adoptando en muchos casos las mismas perspectivas de las postales o los fotógrafos profesionales. Estas vistas convencionales forman parte de la iconografía popular y se adaptan a unos cánones de representación bien definidos y centrados en los monumentos o paisajes más emblemáticos.